Yo no quisiera sentir lo que siento Cuando en la calle las veo pasar. Yo no quisiera escuchar el tormento Que la brisa les canta al soplar. O al padre que pierde el control, Los dos inclinan la cabeza Cuando rezan por un favor... Mas no el mando de su voz. Ellos se alejan como otros, Y a veces vuelven, vuelven, vuelven sin razón. Se arrodillan y oran por sus favores, ¿Tiene Dios que ver con estas situaciones? ¿Cuál es su propósito para nosotros? A ella, que amistad ofrece Pero él desea algo más, Para poder con otra estar... Les piden: Vuelve, vuelve, vuelve... a amar. Lo contrario hacemos de lo que anhelamos Para ocultar así lo que queremos. Como el vendedor que lo hace con engaños O el ladrón que no sólo roba el dinero. Roba el recuerdo y, sin quererlo, pierde su anhelo, su corazón. Son de Dios y no de alguien más, Pero ojalá no escuchara el lamento Que las parejas cantan al pasar...