Nadie se lo imagino que el rey del mundo, El Salvador En un establo de Belén iba a nacer Todo fue tan diferente a como lo esperaban ver El Salvador en un pesebre en vez de fuerte, débil fue Fue como raíz en tierra seca Como ver a un renuevo castigado por el sol Fue como una llama en la tormenta Como ver solo una gota en el desierto descender Bienaventurado aquel que no halle en el tropiezo Que puede en él creer, sin distracción Bienaventurado aquel que puede recibirlo Y dar al Rey morada en su interior Y en su corazón darle habitación Nadie se lo imagino que el rey del mundo, El Salvador En un establo de Belén iba a nacer Todo fue tan diferente a como lo esperaban ver El Salvador en un pesebre en vez de fuerte, débil fue Fue como raíz en tierra seca Como ver a un renuevo castigado por el sol Fue como una llama en la tormenta Como ver solo una gota en el desierto descender Bienaventurado aquel que no halle en el tropiezo Que puede en él creer, sin distracción Bienaventurado aquel que puede recibirlo Y dar al Rey morada en su interior Y en su corazón darle habitación