Sube, sube, sube nuestra alabanza Con manos extendidas y acción de gracias. Con todas mis fuerzas, alegría y danza. Doy vueltas en el aire y grito alabanzas. El Tabernáculo caído de David hoy en día lo levantamos, Para que los hombres busquen al Señor. Un lugar de danza y alabanza extravagante. Yo vengo al Tabernáculo de David Lugar de Adoración Para todas las naciones Donde los ciegos y los cojos se sanan El pueblo se llena de su unción Para llevarla a sus casas Un lugar de intimidad con Dios Donde adultos y niños alaban con libertad Pureza y luz que quema, Donde la oscuridad no se puede quedar Un lugar de revelación y guía. Jesús está sentado en su Trono De autoridad El Fuerte Cetro de su Señorío Sale desde Sion Declaramos guerra, contrapotestades Gobernamos en el poder de resurrección.