A veces soy la herida, a veces la armadura A veces paso el tiempo y a veces paso factura Qué difícil es curar a un corazón de su locura Como pegar un plato sin que quede una fisura A veces soy la risa, otras sólo un payaso A veces soy la ouija y otras sólo muevo el vaso A veces soy la brisa, otras con todo arraso Unas Torre de Pisa, otras la Torre de Paso Pero ¿quién iba a pensar que pensar era imprudente? Que lo más especial fuera normal y corriente Que el que prejuzgó todo cambiaría de repente Tras conocer a un manco teniendo dedos de frente Que hay olvidos que curan, pero no te reconfortan Que no hay droga más dura que un beso que te transporta Que la mentira duele cuando la verdad importa Que para quien te quiere cualquier distancia es muy corta Quién iba a pensar que de vez en cuando Aparece un as entre descartes Ha sido un placer poder conocerme Antes de decirme adiós He sido un transeúnte, he ido de nube en nube Caí en la penumbra, lo que baja a veces sube La lumbre me deslumbra, la cumbre me da sombra La fama me llamaba y ahora cuelgo si me nombra A veces fui cobarde, asusté también al miedo Llegué tarde a valorar a cada uno de mis dedos Cortejé al arcoiris tan perfecto y sin matices Y al final lo mejor de la paleta son los grises Pero aún así me pinto que todo lleva a Roma Pero es Roma el laberinto, y ahí estoy yo... Haciendo acupuntura con agujas del reloj Que el amor que está en venta no tiene garantía Que el sol que más calienta es el que más pronto se enfría Que no hay mejor momento que vivir un día a día Que cualquier sentimiento tenía su anatomía Quién iba a pensar que de vez en cuando Aparece un as entre descartes Ha sido un placer poder conocerme Antes de decirme adiós A veces comandante del rumbo que origino Y a veces tripulante de la rueda del destino A veces me sé cierto y a veces me adivino Y otras me despierto sólo cuando me imagino A veces elegante y a veces un mezquino A veces doy el cante, otras canto, pero afino A veces caminante y a veces el camino Unas soy un gigante, otras tan solo un molino Convertiré mi fe en paisajes de montaña Y haré de mis pestañas dos cabañas frente al mar Para arañar mis musas viendo pasar musarañas El resto es artimaña y no nos vamos a engañar Creería en el desierto si no fuera por los páramos Creería que no hay viento si no fuera por los álamos Creería en lo que veo si no fuera por los átomos Creería en cualquier verso si no fuera por mis párrafos Quién iba a pensar que de vez en cuando Aparece un as entre descartes Ha sido un placer poder conocerme Antes de decirme adiós Quién iba a pensar... ♪ A veces el tormento, otras soy la tormenta A veces tengo cuento, otras me tengo en cuenta ¡Qué fácil resbalarse en el rellano de esta puerta! No es que me caiga siempre, es que la vida da mil vueltas A veces soy desierto y a veces la cubierta Del barco naufragado al navegar en mar abierta A veces la incoherencia de una memoria incierta Y a veces la conciencia de saber a ciencia cierta Soy yo...