Nadie habrá que pueda renunciar después a un baño en aquel lago Nadie habrá que pueda renunciar después a un beso tan bien dado No habrá en la Tierra un solo ser que menosprecie los abrazos Ya no habrá dudas, al prever que de esa fiesta no nos vamos Ni de ninguna más Jamás Nadie habrá que pueda renunciar después a un pícnic en la playa Nadie habrá sin ganas de saltar al sol y abrazar a las cabras Tú nacerás en un presente en el que el mundo es un regalo Y sé que te preguntarás: ¿a estos, qué mosca les ha picado? No había nadie preparado para dejar de avanzar Nadie nos había contado, ¿quiénes somos de verdad? Nadie podía sospechar que seríamos tan torpes Y es que, el universo es paz Y nosotros damos golpes Nadie habrá que pueda renunciar después a un Magnum almendrado Nadie habrá sin ganas de bailar después la conga en cualquier lado No habrá en la Tierra un solo ser que menosprecie los abrazos Ya no habrá dudas, al prever que de esa fiesta no nos vamos Ni de ninguna más Jamás La-la-la, la-la-la-la-la La-la-la, la-la-la-la-la La, la-la La-la-la, la-la-la-la-la La-la-la, la-la-la-la-la La, la-la La-la-la, la-la-la-la-la La-la-la, la-la-la-la-la La, la-la La-la-la, la-la-la-la-la La-la-la, la-la-la-la-la La, la-la