Cuantos jilgueros y cenzontles veo pasar, Pero que triste cantan esas avecillas Van a Chihuahua a llorar sobre el Parral Donde descansa el General Francisco Villa Lloran al ver, aquella tumba Donde descansa para siempre el general, Y ni un clavel, ni por ninguna Solo hojas secas que le ofrece el vendaval De sus Dorados, nadie quiere recordar, Y Villa duerme bajo el cielo, de Chihuahua, Solo las aves que grojean bajo el Parral Van a llorar sobre la tumba abandonada Solo uno fue, que no ha olvidado A su sepulcro una oración a murmurar Amigo fiel, cual buen Dorado Grabo en su tumba, estoy presente General Canten jilgueros y cenzontles sin parar, Y que sus trinos se oigan en la serranía Y cuando vuelen bajo el cielo del Parral Lloren conmigo por aquel Francisco Villa Adiós, adiós, mis avecillas, Yo también quiero recordar a mi nación, Que allá en Parral, descansa Villa En el regazo del lugar que tanto amo