Ay de mí, ay de mí, Si no anuncio el Evangelio Que Dios me confió. Ay de mí, ay de mí, Si no anuncio el Evangelio Que Dios me confió. Ay de mí, ay ay ay de mí, Si no anuncio el Evangelio Que a mí me salvó. Predicarlo no es para mi gloria Es una necesidad, Dios ha puesto un fuego en mi alma Dios ha puesto un fuego en mi alma Me ha confiado una misión. Ay de mí, ay de mí, Si no anuncio el Evangelio Que Dios me confió. Ay de mí, ay ay ay de mí, Si no anuncio el Evangelio Que a mí me salvó. Me ha llamado para ser su apóstol Con frutos mi vida llenó, Y no busco recompensa Y no busco recompensa Mi timbre de gloria es Jesús, es Jesús. Ay ay ay ay ay ay Me hice esclavo siendo libre Para que triunfe el amor, Entre débiles me cuento Para que escuchen su voz. Ay de mí, ay de mí, Si no anuncio el Evangelio Que Dios me confió. Ay de mí, ay ay ay de mí, Si no anuncio el Evangelio Que a mí me salvó. Esto es mas que una carrera, Por un premio sin valor Que no se pudra tu corona Que tu meta sea Jesús. Ay de mí, ay de mí, Si no anuncio el Evangelio Que Dios me confió. Ay de mí, ay ay ay de mí, Si no anuncio el Evangelio Que a mí me salvó. Si no anuncio el Evangelio Que Dios me confió, Si no anuncio el Evangelio Que a mi me salvó.