Caballos... Lo que se dice caballos Confieso que he visto alguno, Desde el pangaré al lobuno Supe andar en más de uno Por estos campos de Dios. Nunca los tuve de a dos, Un poco, por no repartir cariño, Y así desde que era niño Siempre de a uno el caballo. Porque en cuestión del querer El caballo y la mujer Suelen ponerse celosos, Y es que he visto a tantos mozos Quedar sin guaina y de a pie. Pero si se tiene fe, Sin ánimo de ofender Tenga de a uno el caballo, De a dos tenga la mujer. Lindo animal el caballo, Linda su estampa y pelaje, Lindo verlo en el paisaje De nuestro campo argentino. Y linda la cuatro por cuatro, Lindo el aire acomodado, Fuerza bruta y cien caballos Y con turbo, una manada. Pero fijate si a ver Podes mirarlo a los ojos Sentir calor en su piel De acero y faros de iodo. A ver si en el malezal Por cañadas y andurriales Puede mostrar lo que vale Igual que un solo caballo. Tu caballo y mi caballo Se conocieron la tarde Que vos viniste a dejarme Tu flor de buena amistad. Ellos se hicieron hermanos De potrero y de palenque, Vos y yo fuimos hermanos De churrascos y aguardiente. Y así, entre la guerra y la paz, Destrezas y cabalgatas, Entre ponchos y alpargatas, Entre bastos y caronas, Por corrales y cordeonas, Por remates y subastas, Con botas y con espuelas, Entre cabrestos y suelas, siempre así. Tu caballo y mi caballo, Rienda firme o rienda suelta, Ayer potros, hoy de vuelta. Saben cuánto los queremos Y cómo los respetamos, Y que el lugar que le damos Se lo tienen merecidos, Por eso es que son queridos Por criollos y bien paridos, Por gauchos y por cabales. Si alguno te puso precio Por dar valor a las cosas, Noble caballo argentino, ¡nadie sabe cuánto vales!