Antes de que tengas policía, política y salas de tortura Y las plazas y los parques sean lugares inseguros Lugares inseguros pasear entre los árboles y flores Y en las cafeterías sea necesario hablar en voz baja Escribir los pensamientos en las paredes de los inodoros Antes de que sea indigno ser campesino Antes de que se prohíban los jardines y los parques Después de las seis de la tarde Antes de que haya censura y te abran las cartas Y las cartas no te lleguen Y haya toque de queda Y prohibidas las reuniones sin permiso Los grupos callejeros, los bailes y los besos Antes de que una madre escriba (Señor Presidente ruego decirme dónde está mi hijo detenido) Hace un mes Antes, antes de que haya policía clandestina Y dineros clandestinos Pa' la poli, poli-poli clandestina Y no digas nada a la televisión Nada a la prensa y nada a nadie Salvo a las organizaciones que habrán nacido entonces Antes, antes de que no valga la pena vivir en ti Porque se haya perdido el último rincón del mundo Donde un hombre pueda parecer un hombre Y antes de que te descompongas, te deformes, Te deshagas, de que desaparezcas De que te manches, de que te ensucies, De que te pudras, de que te enmierdes Quiero aprovechar para pronunciar tu nombre Sin sentir pena ni asco Costa Rica