Espejos que repiten la inmensidad Relojes que aseguran la eternidad Hasta el fin Dilemas que debimos dejar atrás Para poder de a poco recomenzar A vivir Apologías de la desolación Que sólamente sirven para escribir Tu canción Pedazos de paisajes en un cajón Son lápices cansados de torturar Su renglón Es tan simple entrar Es como empezar a saber Que el silencio es vértigo Efímera y frágil longevidad Detalles de detalles que volverán Sin frenar Saberse traicionado sin ser traidor Sentirse olvidado en un rincón Del dolor Haber sangrado lágrimas de cristal Haber juntado claves de álgebras Sin pensar Es tan simple entrar Es como empezar a saber Que el silencio es vértigo Y el furor de su voz Esfumó a las nubes El furor de su voz Da calor cuando une No tengo idea cuándo amanecerá Me hundo con la noche en profundidad Sin soñar Apretando los párpados sin dormir Recorro los instantes que no debí Recordar Y el furor de su voz Esfumó a las nubes El furor de su voz Da calor cuando une Y es tan simple entrar Es como empezar a saber Que el silencio es vértigo Que el silencio es vértigo