Hubo allá en el Sacro monte, En un tiempo, un farolero Que con dos vasos de vino Era un tipo con salero. Treinta faroles tenía En el barrio pa' encender Y cuando iba fuma'o No encendía más que tres. Y por eso los enamora'os, Que a deshora la pava pelaba, Le pagaban dos chatos de vino Porque de su ceguera abusaban. Y por esos barrios al verlo pasar, Los novios y novias solían cantar: Faroleeeeeerooo; Farolero, tú que vas Un poquito alumbra'o, Déjate este farol apaga'o Que en las cosas del querer Casi siempre ha pasa'o Que la luz de un farol ha estorba'o. Farolero, farolero Por castizo y flamenco te quiero. Farolero, tu que vas un poquito alumbra'o, Déjate este farol apaga'o. Cierta noche el farolero, Bajo un farol apaga'o, Sorprendió a una parejita En un plan exagera'o. De qué forma y qué hechura A los dos los encontró; Se le pasó la bulera Y de esta manera exclamó: "¡Desde hoy por la gloria de Godó Que este barrio sin luz no se queda, Pues prefiero encender los faroles A tener que apagar esta vela." Y por esos barrios al verlo pasar, Los novios y novias solían cantar: Faroleeeeeerooo; Farolero, tú que vas Un poquito alumbra'o, Déjate este farol apaga'o Que en las cosas del querer Casi siempre ha pasa'o Que la luz de un farol ha estorba'o. Farolero, farolero Por castizo y flamenco te quiero. Farolero, tu que vas un poquito alumbra'o, Déjate este farol apaga'o.