La vida es una visión
Que va por la tierra andando
Se acaba sin saber cuando
Y solo queda admiración
(Ah, ah, ah, solo queda admiración)
Se acaba en el panteón
Pobre alma sin consuelo
Allí duerme sin desvelo
Después que la tumba cierra
El cuerpo queda en la tierra
Y el espíritu en el cielo
(Ah, ah, ah, y el espíritu en el cielo)
(Ah, ah, ah, y el espíritu en el cielo)
Solo Dios nada más sabe
Su [?] ha de morir
Y cuando va a convertir
Hace el cuerpo en un cadaver
(Ah, ah, ah, aquel cuerpo en un cadaver)
Cuando el paciente está grave
Es la muerte quien le avisa
De su lado no se quita
Hasta su alma arrancar
Se la tiene que llevar
Porque Dios la necesita
(Ah, ah, ah, porque Dios la necesita)
(Ah, ah, ah, porque Dios la necesita)
Se lleva a los presidentes
Que no les faltan doctores
Ministros y gobernadores
Que son hombres eminentes
(Ah, ah, ah, que son hombres eminentes)
Y no es malo ni inconsciente
Él mata es por un deber
Pa' que podamos caber
Tiene que ir ento'es sacando
Para ir desocupando
A los que están por nacer
(Ah, ah, ah, a los que están por nacer)
(Ah, ah, ah, a los que están por nacer)
El terrible panteón
Donde no vale el dinero
Allí vale un jornalero
Lo mismo que vale un don
(Ah, ah, ah, lo mismo que vale un don)
Allí no vale pasión
Ni vale tener pudor
Es que el cráneo de un doctor
Es igual a un testarudo
Quedan los huesos desnudos
Todos de un solo color
(Ah, ah, ah, todos de un solo color)
(Ah, ah, ah, todos de un solo color)