Cada vez que el ascensor nos separaba, empezaba otra vez la cuenta atrás. Yo tenía que marcharme siempre lejos, tú tenías luego que ir a trabajar. Si pudiéramos borrar tanta distancia, si las cosas valieran la mitad. Si los bancos hoy abrieran de rebajas, si en tu empresa siempre fuera siempre carnaval. Y es mejor pintar colores que vivir en blanco y negro sin manchar La señora de los gatos se aburre cada tarde en su sofá Dime que no llegará... ese avión a despegar He sacado un ocho y medio en ir de fiesta. Y ya me clavé la aguja del pajar. Pero no me he acostumbrado a oír disparos. Ni a buscar culpables a esta soledad. Y es mejor probar sabores que vivir a dieta de mediocridad La señora de los gatos se aburre cada tarde en su sofá Dime que no llegará... ese avión a aterrizar. Y es mejor hacer reír que ganar y que golear Que te larguen por decir siempre la verdad Las cosas a la cara