Aquí está mi cuerpo muerto, al fin ¿Qué es lo que, sus mentes, esperaban de mí? Todos concurrieron sin hablar Y la ceremonia transcurría igual Yo los miraba desde mi ángulo más cómodo Pero el ángel gritó: "seis" ♪ No quedaba nadie sin llorar El cordón de plata terminaba triunfal ¿Cuántos somos, ya, los héroes obiglados Por la vieja historia de Caín y Abel? Yo los miraba desde mi ángulo más cómodo Pero el ángel gritó: "seis"