Tú me diste la oportunidad . De partir las bisagras oxidadas de tu pecho. Tú me diste la oportunidad . De sentir que tu boca era la hora del recreo. Tú me diste la oportunidad . De olvidar por fin las dimensiones del olvido. Tú me diste la oportunidad . De ganar el regalo que hay debajo de tu ombligo. Sólo por ti, sólo por ti . Al quitar tus botones me desabroché del suelo. Sólo por ti, sólo por ti . El principio fueron tus pies y el final fue tu pelo. Sólo por ti, sólo por ti . Al vernos los relojes agachaban la cabeza. Sólo por ti . Supe bien que la dictadura de la primavera . Eras tú, cada día, frotando el óxido de la utopía Y la única condena era no amarse más todavía. Y es que estar a tu lado era . Querer hacerte una pulsera con polvo de estrellas Y saber que no hay manera de vivir . Si no es tu ropa mi bandera. Y es que estar a tu lado era . Querer hacerte una cuna con algodón de azúcar Y curarme las heridas del ayer . Tiritas bañadas en el sudor tu nuca. Tú me diste la oportunidad . De cubrir con tus prendas todo el suelo de mi cuarto. Tú me diste la oportunidad . De conocer el lenguaje profundo de las manos. Tú me diste la oportunidad . De darle a mi cama el sudor que le faltaba. Tú me diste la oportunidad . De que la piel sobrase al querer tocarte el alma. Sólo por ti, sólo por ti . Al quitar tus botones me desabroché del suelo. Sólo por ti, sólo por ti . El principio fueron tus pies y el final fue tu pelo. Sólo por ti, sólo por ti . Al vernos los relojes agachaban la cabeza. Sólo por ti . Supe bien que la dictadura de la primavera . Eras tú, cada día, frotando el óxido de la utopía Y la única condena era no amarse más todavía. Y es que estar a tu lado era . Querer hacerte una pulsera con polvo de estrellas Y saber que no hay manera de vivir . Si no es tu ropa mi bandera. Y es que estar a tu lado era . Querer hacerte una pulsera con polvo de estrellas Y saber que no hay manera de vivir . Si no es tu ropa mi bandera. Y es que estar a tu lado era . Querer hacerte una cuna con algodón de azúcar Y curarme las heridas del ayer . Con tiritas bañadas en el sudor tu nuca . Con tiritas bañadas en el sudor de tu nuca. Y es que estar a tu lado era . La dictadura de la primavera, Desabrocharme del suelo, Volverme loco vistiéndote con mis besos. Te aseguro que yo nunca olvidé . Que tú me diste la oportunidad Y . tú me diste la felicidad.