CELSO QUIÑONEZ Del 2003 a la fecha Ya han pasado algunos años Del 2003 a la fecha Ya han pasado algunos años Pero para sus cuatro hijos También para sus hermanos El recuerdo sigue vivo La ausencia sigue pesando Del señor Celso Quiñones El de Tejamen Durango Hombre de aspecto ranchero Alegre y muy buen amigo De botas y sombrero Ese siempre fue si estilo Le gustaba la parranda Al igual que los corridos Y hablando en cuestión de amores Era un gallo de los finos En la ciudad de Tecate Era donde radicaba Y esa carretera 3 Con el rumbo de Ensenada Por cuestiones de trabajo A diario la transitaba De Tecate hasta aquel rancho Del que Celso se encargaba Y desde Chicago hasta el cielo Un saludo pal compa Celso De parte de su hermano José Quiñonez Que lo sigue extrañando, vamos Aquella tarde de mayo Hizo lo mismo de siempre Que se le mirara extraño Fue lo único diferente Se despidió de sus hijas La de casa y una ausente Haciendo tiempo al salir Como evadiendo a la muerte Se detuvo en una tienda Donde tenía unos amigos Nada más a despedirse Y siguió por su camino Y en el tramo del columpio Se encontró con su destino Dos tráiler venían de frente Sin manera de evadirlos Varios metros fue arrastrado Por supuesto ya sin vida Con el cuerpo destrozado Por eso nadie entendía Que el rostro estuviera intacto Y en sus muecas se veía Una gran tranquilidad Cómo si nomás dormía Su hermano José Quiñónez Mucho lo sigue extrañando Al igual que su hija Elda Noemí Miriam y Pablo En el panteón de Tecate Don Celso está descansando Ya no pudo regresar A su Tejamen durango