Y cuando el mundo terminó Con hilos de esperanza Yo empecé a coser una burbuja en mi mente En la que tú existías y vivías inmortalizado como un fantasma del pasado Cuando no podía aguantar El insoportable dolor de la verdad Me refugiaba en tu esfera deslumbrante Y te abrazaba Hasta que el sueño se apoderaba Pensaba que si esperaba suficiente tiempo Y aguantaba este sufrimiento La vida me recompensaría Y me devolvería tu piel Que alguna mañana me despertaría Y entre las sábanas te encontraría Que solo era una pesadilla Prefería ignorar la realidad Que hace mil días Tú ya habías avanzado sin mí Y yo me quedé por el camino Congelado en el pasado Pero era esa ilusión y esperanza La que cada día me mantenía vivo Y con ánimo para seguir adelante Aunque dentro de mis entrañas yo sabía que tú ya nunca más volverías Allí empecé una carta Que nunca terminé de escribir Allí empecé a escribir una carta Que nunca te mandé