No dejo de mirar Los ojos del señor sabelotodo Viento y hojas secas me aconseja Y en vez de hacerle caso Me hundo en la madera No dejo de mirar Los ojos del señor sabelotodo Mi madre me aconseja Que arranque mientras pueda Y en vez de hacerle caso Me pudro en la caverna No me puedo alejar No soy pájaro No me voy acercar tampoco No quiero naufragar Porque no sé nadar No son tácticas Antipoéticas Son fantasmas Que andan detrás mío Con guardianes siderales Que ya no me dan frío Trabajan mis lagrimales Van muy rápidas Histéricas Mis ganas de atrapar Tus movimientos ¡qué desastroso! ¡¿Por qué demonios entraste en mí?! Voy trágica Antipolártica Más que frenética En lo platónico ¿Por qué demonios? ¿Por qué demonios? ¿Por qué demonios? ¡Yo lo pregunto! No me basta la imagen de buda La ansiedad es imperialista Esperar el anarquista Trabajar y trabajar Porque nunca se calla la conciencia Si la duermo no sé si sueñe tranquila Si sueñe tranquila Si sueñe Nunca se apaga La conciencia Y está conversando Con la tuya Con la tuya Con la tuya