Os voy a contar una historia de amor entre un gallo y una gallina.
Ella, muy coqueta y distinguida,
Y el gallo, un pobre trobador, que para declarar su amor a la gallina compuso una hermosa canción.
Y a la luz de la luna, en la puerta del gallinero,
Con las palabras más esdrújulas
Que un diccionario encontró
A la tan elegante gallina
El gallo así le cantó:
"En una góndola del mar Adriático
Un gallo lúgubre se apareció
Con una cítara bajo del brazo
Los gallineros atravesó.
Y acomodándose en un palo gótico
Templó su cítara y así cantó
Y acomodándose en un palo gótico
Templó su cítara y así cantó:
Piedad del náufrago, gallina esdrújula
Sé tú la brújula de mi vivir,
Piedad del náufrago, gallina esdrújula
Sé tú la brújula de mi vivir.
Y en esos túmulos del orden jónico
Serás un tónico para el sufrir.
No me creas frígido porque esté apático
Soy poco táctico doncel de amor,
Siento en mi cóncavo pecho volcánico
Amor satánico devorador.
Si a un sarcófago me inclino rápido
Tu cuerpo lápido me cubrirá,
Si a un sarcófago me inclino rápido
Tu cuerpo lápido me cubrirá,
Y en el patíbulo por más patético
Mi amor gallístico terminará.
Entonces, la gallina ofendida,
Saltó de su palo dorado
Y con un cubo de agua, al gallo romántico le bañó.
Y el gallo trovero humillado,
Se fue en busca de su diccionario
Y compuso una nueva canción.
Y a la gallina tan altiva, de esta forma le insultó:
Gallina histérica, gallina insólita,
Analfabética, genio inmortal,
óxido tóxico, naranja cítrica,
Y olor ardiente de un basural,
Gallina fláquita, gallina cógita,
Tu eres más fiérita que la maldad,
Gallina fláquita, gallina cógita,
Tu eres más fiérita que la maldad,
Y si mi cántico no te ha gustado
Lágrima púrpura derramarás.