No me atrevo a verte a los ojos, Me duele saber que he traicionado Tu confianza en mi. Y me pesa tanto en el corazón, Haberte ofendido, Por eso estoy aquí. De rodillas a tu ventana, detrás de la persiana Como un niño que no sabe por donde empezar, Con vergüenza y con la esperanza de abrazarte en la gracia Jesús mío quiero encontrar Un siervo en tu casa, pescador de las almas Que te haga presente al confesarte mi aflicción, Escuchar tu consejo, y saber lo que debo Hacer para ser limpia con tu Absolución. Necesito llenar el vaso, Con tu agua de vida, Y sacar cada piedra que ocupa la sima. De rodillas a tu ventana, detrás de la persiana Como un niño que no sabe por donde empezar, Con vergüenza y con la esperanza de abrazarte en la gracia Jesús mío quiero encontrar Un siervo en tu casa, pescador de las almas Que te haga presente al confesarte mi aflicción, Escuchar tu consejo, y saber lo que debo Hacer para ser limpia con tu Absolución. (bis)