Vivo haciendo gala de mi espíritu inquieto Y muerdo el polvo tras preguntarme a qué sabrá. En un banquete como este hay que esconder la hilacha Hacerle caso al temor Alzar tu copa, brindar por la mediocridad. El miedo en serio llega cuando la niebla se desvanece Y es evidente que no había nada a qué temer. Si en nuestra fiesta lo único importante es mantener la imagen Y el cisne de hielo aguanta un rato más. Estaba seguro de que eras un sueño Hasta que te hablé y te reíste hasta llorar. Sé que es mi culpa por idealizar Dos peces atrapados por el mismo anzuelo que Solo querían una carnada y poco más. ¿Por qué arriesgar?, firmemos el futuro arrepentimiento Anticipar al destino queda previsor Y nuestra fiesta está garantizada porque al final siempre El cisne de hielo aguanta un rato más.