El cielo bajo mi cama, el infierno dentro de mí. Guardando un equilibrio que juré no romper. Páginas gastadas, impresiones de mi niñez Mi base Apolo, macabro terror a lo Poe. Historias para no dormir, pregunta a Chicho "Un, dos tres", Tres millones de cassettes que graban el Diario Pop; Cine-Exín de autor. Eternas guerras entre el Doctor Mabusse y un póster del Ché. Mi sangre abriendo caminos que no llevan al mar. Surf en mi mente, vagabundeo estelar, Amores que olvidé sobre un disco del gran Marvin Gaye. Misteriosos licores que yo osé catar, Independencia defendida bien, o quizás fuera mal, con valor. Esas pequeñas cosas que me hacían feliz Ahora se me esfuman entre el cielo, el infierno, el panda y una taza sin té. Recuerdos que se acumulan, lastre bajo mis pies, Hasta hacerme entender que no hay ningún Peter Pan, ni tierra de Nuncajamás, Pero es ahora cuando pienso en volar.