En el taller de bordados Donde voy a trabajar Cierto torero famoso Su capote dio a bordar Como me tiene por más diestra Me dijo la maestra que lo bordara yo Y unos dibujos caprichosos Y adornos primorosos mi mano allí trazó Aquel torero fue de quien me enamoré Pero en la humilde obrerita No se fijó aquel torero Que se rifaban las hembras Ante el imán del dinero Con otras triunfaba Y yo de pena lloraba El automóvil de lujo Ante mí lo vi pasar Cuando marchaba una tarde A la plaza a torear Una mujer iba a su lado Y el diestro embelesado Le hablaba con pasión Ella, mimosa, sonreía Fingiendo que tenía Por él gran ilusión Y yo a los toros fui Por ver al diestro allí Pero al salir la cuadrilla Y tras de hacer el paseo En un palco echó el capote Como quien brinda un trofeo La capa lucía Otra mujer que él quería Qué tarde aquella, Dios mío Nunca la podré olvidar Entre las astas del toro Se quedó al ir a matar Gritos de angustia resonaron Que el alma me dejaron Transida de dolor Y por besar al que moría Corrí a la enfermería En alas de mi amor Y cuando allí llegué Sin vida lo encontré Una mujer solamente Junto al torero se hallaba La que bordó su capote La que de verdad lo amaba Las otras se fueron Y ni rezarle supieron