Atrás quedaron los pueblos, Con sus casas y sus huertos; Los soldados marchan ciegos, Por el medio del desierto. Los soldados vienen grises, Cual procesión de fantasmas; Fiebre, pampa, polvo y sol, Queman sus gargantas. "¡Adelante, vivo el paso!", Grita el sargento Chamorro Y el suelo vibra al redoble, De los duros calamorros. Hilera de rojo y de azul, (Hilera de rojo y de azul), Caballería y cañones, (caballería y cañón) Van venciendo al arenal, Entre sol y ventarrones. Atras quedaron las novias, los hijos y los amores, Los hombres siguen marchando detrás de sus pabellones, Con su bravo son de estrellas, la noche llega al desierto, Hambre, pena, frío y sed, lleva el regimiento, Adelante vivo el paso, adelante vivo el paso