La abuela se fumaba un cigarro Y no se podía dormir Salía a agradecerle a las estrellas Todo lo que hay por parir Cada vez que se colocaba En su silla de cáñamo hindú Venía el pueblo y le preguntaba Los secretos de la salud ¿Qué remedio hay para la tristeza? ¿Qué hago con la moto en mi cabeza? Ella sonreía y les respondía Y su sabiduría dijo así: ¡Dejalo que baje No preguntes tanto Deja que baje el santo Y todo funciona mejor! Habrá que soltar las amarras Habrá que aprender a nadar Cuentan que le enseñaba Un cangrejo de altamar La cosa nunca se queda En el mismo lugar Hay que moverse un poquito Pa' las penitas curar.