No debería escribirte esto,
No debería sentir esto,
No debería recitarte esto.
No debería, no debería, no debería
Me lo repito cada noche y me lo repito cada día.
Me repito que esos ojos color miedo no pueden hacerme volar
De la manera en la que me están haciendo volar.
Me repito que los cimientos de mis heridas son tiritas si tú estás,
Me repito que llevo varias noches sin dormir porque me cuesta,
Me cuesta relajarme desde que me dijiste que te vas.
Que el insomnio tararea cada madrugada tu nombre,
Que mi sístole y diástole te están pidiendo que vuelvas,
Que mi ego me pone frenos para que no duela
Y yo sigo dándome de hostias porque no lo soporto más.
Cantar a pleno pulmón una canción en el coche,
Darnos un beso,
Como si el mundo se acabara,
Romper con todo y pedirte por favor que no te vayas,
Desear, en voz bajita,
Que te quedes hasta mañana.
Podemos hablar de destino, de universo, de putadas,
Podemos mirarnos a los ojos y prometernos que no sentimos nada,
Pero cariño, créeme cuando te digo,
Que lo que me están haciendo esos ojitos,
Nunca,
Joder,
Créeme que nunca,
Antes lo había sentido.