Yo soy un humilde cancionero Y cantar quiero una historia humana, Pues sé que te ama Quien me hizo este ruego: Si la ves, cancionero dile tú que soy feliz, Que por ella muchas veces te pedí Una canción para brindar Por su alegría. Si la ves, cancionero Dile claro en tu canción Que en mis ojos amanece su ilusión Como una nueva primavera cada día. No le digas que me viste Muy triste y muy cansado, No le digas que sin ella Me siento destrozado. Si la ves, cancionero Vuelve pronto a mi rincón Y aunque mientas haz feliz mi corazón, Vuelve a decirme que me quiere todavía. Se te olvida Que me quieres a pesar de lo que dices Pues llevamos en el alma cicatrices Imposibles de borrar Se te olvida Que hasta puedo hacerte Mal si me decido Pues tu amor lo tengo muy comprometido Pero a fuerza no será Y hoy resulta Que no soy de la estatura de tu vida Y al dejarme casi, casi, se te olvida Que hay un pacto entre los dos Por mi parte Te devuelvo tu promesa de adorarme Ni siquiera sientas pena por dejarme Que ese pacto No es con Dios Ya todo lo llenas tú, Yo no soy nada en ti Y te voy a dejar Al fin tú eres feliz, Ni lo vas a notar. Soy dolor que nunca te ha dolido, Soy amor que a fuerza se ha metido; Soy una simple comparsa Y por eso me voy No sufriré tu altivez Aunque puedas vivir Con el mundo a tus pies, Si mi más grande amor Tan pequeño lo ves Me haces menos Y ese es mi coraje Y si no te gusta lo que traje Adiós que de algún modo Seguiré mi viaje.