Era necesario estar, Fue necesario pelear, poco a poco colocar cada pilar. Ahora de aquí, ahora de allá, c Reé mi torre de Babel que tantas veces levanté y volvió a caer. Escribí cada son, Cada guerra una canción y aprendí que la gloria es un disfraz. Inflexible, ideal, fuego al fuego, Mal al mal, una turba a un principio desleal. El carroñero esperará, s U momento está al llegar. Con la muerte y el temor xalma su sed. Escribí cada son, cada guerra una canción y aprendí que la gloria es Un disfraz. Me marché al sentir esa sucia Decepción. Mi blasón es mi torre de Babel. Bien, consumido por su bien, pie detrás de un traspiés, l A ceguera de un rehén. Ser una pieza de ajedrez que se ha Negado a ser ni una parte ni un juez