Suenan las diez en un reloj Y ante el espejo tu te peinas para él, Tratando en vano de ocultar una vez más Tu palidez. En el sofá, en un rincón, Hay un vestido blanco y un ramo de azahar. Y hay en tus ojos una lágrima fugaz. Vas a perder tu libertad. Cuando suenen las campanas Y camines al altar Yo estaré entre la gente Como un invitado más. Cruzaremos la mirada Y en tus ojos podré ver Que me quieres como antes, Que me quieres como ayer. Ante el altar vas a mentir Jurando amor, ternura y fidelidad. Ante los hombres y ate Dios vas a ocultar Que sólo a mí podrás amar. Cuando suenen las campanas Y camines al altar Yo estaré entre la gente Como un invitado más. Cruzaremos la mirada Y en tus ojos podré ver Que me quieres como antes, Que me quieres como ayer. Cuando suenen las campanas Y camines al altar Yo estaré entre la gente...