Que lindo era sentarse en la mesa de un bar Y ver a Buenos Aires, o Medellín o Bogotá pasar y pasar... Pasa un cartero en bicicleta Con telegramas color violeta Un patrullero de la policia Que busca un chorro hace quince días Pasa el lechero con cara de nada Vendiendo el leche contaminada Y un escribano serio y cerrado Tirándole besos a un abogado Pasa un político con paso corto Añorando el congreso con aire absorto Pasa un vampiro buscando una mina Pero lo violan pasando la esquina Pasa el verdugo con su picana Y al tiempo que pasa me mira con ganas Y pasan dos tuercas comiendo picadas Se cruza una vieja y la hacen pomada Pasan los taxis y los colectivos Las secretarias del Ejecutivo Un jubilado tangodeante Jorge Luis Borges, la niña y su amante Los siete locos, los contrabandistas Los buenos hombres, los masoquistas Las prostitutas con sus pianistas Las curanderas y sus analistas Pasa una niña de mil apellidos Vendiendo celosa los desposeídos Pasa una banda de criminales En sus hermosas motos policiales Pasa un Mercedes con chapa extranjera Llevando el amante de un tipo cualquiera Y pasa un Mercedes con chapa oficial Llevando el amante de un general Pasan oscuros los empleados Clavándole el codo al tipo de al lado Pasan oscuros los tipos de al lado Clavándole el codo a los desocupados Pasan corriendo los estudiantes Porque los persiguen los vigilantes Y pasan corriendo los vigilantes Porque los persiguen los estudiantes Pasa un obrero en alpargatas Con veinte pesos que es toda su plata Pasa el Ministro de Economía Le dice: Mi hijito no hay más plusvalía! Pasan los locos, pasan los cuerdos Si no les das corte te dan con un fierro Y una señora con traje escotado Un cura la sigue y cae en pecado Pasan los presos con aire de muerte Pasan llorando su triste suerte Paso yo mismo y me veo sentado Mirando la gente que pasa a mi lado Pasa la guardia del Presidente Los sables al aire todos dementes Y pasa la historia de nuestra nación Siglo tras siglo sin solución Pasan los gatos, pasan los perros Pasan los vivos, pasan los muertos Pasan corriendo, pasan zumbando Pasa el silencio y pasa gritando Pasa el país y el continente Pasa mi vida estupidamente Mientras estoy en la mesa de un bar Viendo a Buenos Aires, Medellín o Bogotá pasar y pasar.