A mi gran amigo Antonio Peña Márquez Menos faltarle a mi mare To' te lo consiento serrana Menos faltarle a mi mare Que a una mare no se encuentra Y a ti te encontré en la calle Vete si no te tiene cuenta Te acuerdas de aquella copla que escuchamos aquel día Sin saber quién la cantaba ni de qué rincón salía Pero qué estilo, qué duende, qué sentimiento y qué voz Creo que se nos saltaron las lágrimas a los dos Toíto te lo consiento menos faltarle a mi mare Que a una mare no se encuentra Y a ti te encontré en la calle No vayas a figurarte que esto va con intención Tú sabes que por ti tengo clavao en mi corazón El querer más puro y firme que ningún hombre sintiera Por la que Dios, uno y trino, le entregó de compañera Pero es bonita la copla y entra bien por soleares Toíto te lo consiento menos faltarle a mi mare Y me he enterao casualmente de que le faltates ayer Y nadie me la contao, nadie pero yo lo sé Yo tengo entre dos amores mi corazón repartío Si me encuentro a uno llorando es que el otro lo ha ofendío Y mira nunca me quejo de tus caprichos constantes Quieres un vestío, 14, quieres un reloj, de brillantes Ni me importa que la gente vaya de mi murmurando Que soy para ti un muñeco Que si más quitao el mando Que en la diestra y en la siniestra tienes un par de agujeros Por donde se va a los baños el río de mis dineros Y a mi que, con tal que nunca de mi lao te de separes Toíto te lo consiento menos faltarle a mi mare Porque ese mimbre de luto que no levanta su voz Que en seis años no ha tenío contigo ni un sí ni un no Que anda como una pavesa, que no gime ni suspira Que se le llenan los ojos de gloria cuando nos mira Que me crió con su sangre Que me llevaba la mano para que me santiguara Como todo fiel cristiano Y en las candelas del hijo consumió su juventud Cuando era cuarenta veces mucho más guapa que tú Tienes que hacerte a la cuenta que la has visto en los altares Y jincarte de rodillas antes de hablarle a mi mare Porque el amor que te tengo se lo debes a su amor Que yo me casé contigo porque ella me lo mandó Conque a ver si tu conciencia se aprende esta copla mía Muy semejante a aquel cante que escuchamos aquel día Sin saber quién lo cantaba ni de qué rincón salía Desde la cuna, a mi mare de mi alma la quiero desde la cuna Por Dios, no me la avasalles Porque mare no hay más que una Y a ti te encontré en la calle