Me reuní con hindú, un musulmán, un cristiano y un judío Para intentar averiguar de una vez por todas Una de las incógnitas más intrigantes de todos los tiempos ¿Cuál es el dios verdadero? El hindú levantó el brazo y respondió que él sí sabía Que al igual que yo él también dudaba como yo hacía Sin embargo, leyendo de noche y día Descubrió que un dios hindú nos creó mientras dormía "Oh, no" dijo el musulmán con gran indignación Que aquel no era un dios sino simple ficción Que el dios verdadero es diferente Y el Corán lo explica todo claramente "Wow" El cristiano se metió Argumentó la biblia es la palabra de dios Porque entre miles de libros que el ser humano escribió La biblia es el que más copias de todos ellos vendió Habló el judío y argumentó Que el cristianismo del judaísmo nació Pues la mitad de la biblia es plagio de su religión Y que si había un dios verdadero era el primero que llegó Después dijeron que los milagros probaban Sin duda alguna la existencia de un creador Así que mencionaron algunos El hindú habló del milagro de estatuas que bebían leche Figuras del dios Ganesha bebiendo lo que les echen Eso para él demostraba que existe un dios Con cabeza de elefante, cuatro brazos y una flor Entró el musulmán y dijo: Ese no fue dios Los poros de las estatuas filtran leche a su interior Un verdadero milagro hizo Mahoma con su don Multiplicó comida y a mil alimentó Se metió el cristiano en la conversación Dijo que eso estaba bien, pero no lo impresionó Pues Jesús igual que él los panes multiplicó Pero su mayor milagro es que murió y resucitó (Oh) Irrumpió el judío, un tanto molesto Pues no se creía peleaban por eso Dijo los milagros no existían más que en cuentos Porque dios no era un empleado ni de humanos ni de insectos Mi dios es real Y tu dios es falso Tienes que aceptar Es la realidad Sal a preguntar A mi pueblo nato Todos te dirán Tengo la verdad Más tarde hablaron del porqué creen Que dios permite la maldad en la tierra El hindú dijo que eso el karma lo explicaba Que era una especie de juez del que ningún hombre escapaba Todos los pecados que hiciste en vidas pasadas Cuando reencarnas los pagas, el Karma no olvida nada Na na, na, nanana, na nada Nada le creyó el musulmán, na, nada Dijo que si había maldad es para Acabar con los enemigos que dios tiene en su mirada El cristiano se paró Dijo no es así, pues dios es amor Si mal hay aquí, él no lo causó Ya que surge por la ausencia de dios en el corazón Luego el judío dijo: dios lo abarca todo Todo lo hay en el mundo, desde el humano hasta el lodo Por lo que todo lo bueno se hace con dios codo a codo Pero lo malo que pasa dios lo causa de igual modo Mi dios es real Y tu dios es falso Tienes que aceptar Es la realidad Sal a preguntar A mi pueblo nato Todos te dirán Tengo la verdad Enseguida debatieron sobre la vida después de la muerte Si existe el cielo y el infierno, cómo son estos lugares y quiénes van ahí El hindú dijo que es falso que hay un infierno eterno Sólo entras en él un tiempo y luego reencarnas de nuevo Pues los castigos son para volver a alguien bueno ¿Y de qué serviría un ser bueno si nunca sale del fuego? El musulmán frunció el cejo y lo miró muy mal Parecía incluso que lo iba a golpear Porque dijo algo el indio que contradecía a Alá Quien opinaba que el malo nunca merecía paz Pasó el cristiano a defender que no es malo Que se dé el fuego eterno para aquel que hizo el mal Pero que en cambio si se ve a algún villano Arrepentirse en su vida, sí se puede salvar Luego llegó el Judío y dijo: dios, amigo mío No hizo cielos ni castigos, ni el mesías ha venido Okay, yeah, yeah, lo siento, man Pero solo hay una vida, así que no hay por qué temer (En el nombre del padre y del hijo Y del espíritu santo) Mi dios es real Y tu dios es falso Tienes que aceptar Es la realidad Sal a preguntar A mi pueblo nato Todos te dirán Tengo la verdad Brahma es el dios real Dios se llama Alá Cristo es el hijo del Señor Dios el Tetragramatón La discusión se puso acalorada y no tuve más remedio que finalizarla Les di las gracias por haber compartido su tiempo y enseñanza conmigo Y procedieron a marcharse El hindú inclinó la cabeza, se despidió y se fue El musulmán no le dirigió la palabra a nadie y azotó la puerta al salir El judío dijo una palabra en hebreo, y no supe si me estaba bendiciendo o maldiciendo Sin embargo, el cristiano se quedó hasta el final Se acercó a mí manteniendo una sonrisa inquietante Y me susurró al oído que Jesús me amaba Pero que me diera prisa para aceptarlo en mi corazón Antes de que fuera demasiado tarde