Para la luna y las estrellas, una serenata con toda el alma Con versos, que brotan de los puquiales En mi soledad de aquella toma, como en el regazo plateado de tus rayos Recuerdo mis fantasías de amores Luna compañera del chacarero, la mama quilla de los sembríos Contigo labraremos el mañana Callejón ancho de Sallatoma, por donde cabalgan las ilusiones Tus pircas, encaminaron mi vida Con las alforjas llenas de ilusiones Por mil caminos he cabalgado Regresare a andar mis pasos perdidos Y volveré, beberé la luna en los puquiales