Dos metros de silencio, tres cajas por asiento Y sus cómplices miradas Los vasos siempre llenos, cargados de momentos Y algo que celebrar Contaban sus secretos, lacraban sus recuerdos Con sangre en su memoria Vivían el momento, brindaban por los sueños Y las penas que ahogar Sentían todo aquello, tirados por el suelo, Reían en secreto, no hacía falta más... Recuerdo ese aposento con vaho de nuestro aliento Y el frío en primavera Cuerpos estremecidos, se acerca algún vecino No grites, para ya Con risas y consejos, anécdotas y miedos Hacían su propia hoguera Como comprarse un piso, cargado de ilusiones A precio de amistad Sentían todo aquello, tirados por el suelo, Reían en secreto, no hacía falta más... Y aún me acuerdo hoy de aquel lugar, de esos momentos Y pido al tiempo que vuelva a empezar como en los cuentos El tiempo no pasaba, la mente se nublaba, Salían de su celda Se humedecían las ruedas, alguno que se enfada Y ya no hay vuelta atrás Contrato de silencio, oscuro el firmamento Una puerta se cierra La otra queda abierta para esos tres amigos Que un día volverán Sentían todo aquello, tirados por el suelo, Reían en secreto, no hacía falta más... Y aún me acuerdo hoy de aquel lugar, de esos momentos Y pido al tiempo que vuelva a empezar como en los cuentos Y aún me acuerdo hoy de aquel lugar, de esos momentos Y pido al tiempo que vuelva a empezar como en los cuentos