Yo le decía a las olas por favor dejad que venga que no se lleve a mi amiga antes de que pueda verla. A esta vida y la fatiga fatiga de padecerla con sus alegrías y penas pero la espalda bien recta. Y aunque ande por penas sufrimiento y con llanto yo amo el camino, por eso quiero tanto. El suelo que pisas la arena y los charcos que en el agua salada al pasar vas dejando. Con lo rápido que pasan los días no me da tiempo a pensar gracias por este momento robado para un poema que ayer cuando justo salía de casa al pasar la puerta recordé. El mar y las velas las olas que van marcando el camino Que tú llevarás. si no es en los sueños será al despertar por lo que a la corriente nadie puede enseñar. Cuando justo salía de casa al pasar la puerta recordé hace cuanto y como te quería cuanto de menos te eché. Aunque nunca me acostumbrase a que te fueras antes de tiempo por ti, y por todos nuestros mayores que ya marcharon a otra suerte.