Me cerraron el bar con dos versos en la servilleta Me propuse dejar los recuerdos en una cuneta Mi penúltimo affaire se colgó de mi cuerpo rumboso Le engañé con Inés y Don Juan se nos puso celoso Y lloré por llorar que reír no valía la pena Me bebí a tu salud todo el vino de la última cena Deshojé margaritas bixiestas en cada febrero Las braguitas que no llevas puestas son las que prefiero Conociendo el final me lancé a la piscina contigo El placer conyugal desamiga los malos amigos Corazón con rencor desayuno en la cama sin besos En la cama el picor lo agudizan algunos excesos Y lloré por llorar que reír no cabía en el cuento No te pude amar más, que me maten los celos si miento Te busqué en las banderas sin patria de cada verbena Cuando al fin te encontré mi reloj se quedó sin arena Princesita cañí, corazón macerado en hachís Calentón, bomboncito de sal, sarampión que me dio por pasar A sabiendas que yo ya lo ves nunca te iba a olvidar Y hoy no sé si dejar de reír o tal vez no parar de llorar Y lloré por llorar que reír era un cero a la izquierda De tensar nuestro amor se rompió sin quererlo la cuerda Deshojé margaritas bisiestas en cada febrero Las braguitas que no llevas puestas son las que prefiero Deshojé margaritas bisiestas en cada febrero