Ya nunca más me veréis así, porque ha llegado mi hora. Y es que muy pronto voy a morir por amor, por amor. Yo, el Maestro, os quiero servir, porque es mayor el que sirve. Como he hecho yo os debéis amar, confiad, confiad. Yo os amaré hasta el final; no os angustiéis ni temáis. En mí podréis hallar paz, así recordadme, recordadme. Lo que os he dicho debéis hacer si queréis ser mis amigos. Quiero que unidos así estéis, junto a mí, junto a mí. Este pan ahora yo partiré, y mi cuerpo así recordaréis. Haced esto en memoria de mí. Con la copa que ahora os daré nuevo pacto con Dios hallaréis En la sangre que derramaré.