Observador del mar Me conozco el océano Amante del dolor Con carácter de melómano Muero yo tan triste con mi soledad al lado Siento que me encojo cuando estoy tan apagado No quiero seguir estando solo No puedo avanzar de ningún modo Callo mis mentiras cuando el corazón exploro Y vivo solo en mi silencio Donde siempre me acomodo Caigo cada noche acurrucado en un vacío permanente Mi ruina está presente, latente Gritando en mis oídos porque siempre estoy ausente Cayendo en el olvido antes que ver a la gente Me cuesta ser gentil, me cuesta ser amable Espero que me miren pero que nadie me hable Quiero volver a nacer, a no ser indeseable Quiero abandonar por siempre mi caída interminable Siento el silencio Que habita en mi cuerpo Siento el silencio Que me ahoga por dentro Dime qué hay en tus ojos En los míos lloros No encontré lo que buscaba Renuncié al tesoro Mis lágrimas son coros En cada verso sonoro Limpian cada poro Con pureza y sin decoro Muero como todos al final Me resisto a ser alguien inmortal Sé que existo y vivo si pruebo una vez más La dulzura de sus manos abrazándome sin más Dejándome amar He dicho tanto yo He escrito tanto que A veces se me olvidan mis propias palabras Yazgo en el silencio Me invita a descansar Renuncio al resto y siento libertad De noche soy esclavo De mi propio malestar Quiero desencadenar Mi triste felicidad ¿Dónde estabas tú Cuando escribía esta canción? Si entonces no me amaste No busques mi corazón Siento el silencio Que habita en mi cuerpo Siento el silencio Que me ahoga por dentro