Descuida, que me queda más saliva para hundirte en mi desdicha Y enseñarte las heridas respirar, Y no asustes al que viene rojo como las dos rosas Que te traigo pero ojito que espinan, Y no quiero que la sangre que derrames me salpique. No es vida, ensancharse mis pulmones para hincharme los cojones Y eres, siempre la mejor de las personas que ha pasado por mi estima Me regalas los detalles, me conoces hasta ser destructiva Que el destino lo domino y así te incluyo en mi vida. Añora, ese tiempo en el que el viento era el dueño de tu pelo Ahora soy yo el que lo soba y doma, Aunque carezcas de espuelas el caballo que desboca Y que se pierda en tu cabeza. No es vida, ensancharse mis pulmones para hincharme los cojones Y eres, siempre la mejor de las personas que ha pasado por mi estima Me regalas los detalles, me conoces hasta ser destructiva Que el destino lo domino y así te incluyo en mi vida. Sufre por nada, Verás como estallas, Cobarde, hace tiempo me cago por patas Para relojes que oprimen y encogen sabes que eres mi única hada, Que viste de luces mi oscura mirada Y todas las noches ofrece su cama. Si sangras y te encuentras a mi lado llámame que yo me empapo Y anestesio tus dolores con el polen de las flores