Desde la oscuridad del ruido, Robando tiempo sin mirar atrás, Vive sin saber que vive, Agarrado a un clavo ardiendo y no se suelta. ¡Dime que no, no, no! Carpintero de condenas, con el alma me golpeas, sólo hay cruz en la moneda. Carpintero de condenas. Acusa a veces el cansancio De quién espera su oportunidad. El dolor se vuelve viejo Cuando no se está de acuerdo Con el sistema. ¡Dime que no, no, no! Carpintero de condenas, con el alma me golpeas, sólo hay cruz en la moneda. Carpintero de condenas. No, dime que no, dime que no podrías olvidarme. Carpintero de condenas, con el alma me golpeas, sólo hay cruz en la moneda. Carpintero de condenas. No, dime que no, dime que no podrías olvidarme.