En las noches frías, con la última calada Recuerdo aquella mirada y mi pecho ardiendo Yo tirado en la basura, tú desplegando tus alas Cuando el vértigo se apaga, ya no existe el miedo Yo sólo era un crío, y todo me daba igual Prestado tomé aquel coche y mentí sobre mi edad Juntos en el precipicio, no dudamos en saltar Bajo el techo del garaje, nos hicimos estallar Oh, yo sólo quería jugar A ese juego en particular Mis ganas de ella nunca fueron cautas Pero es que yo soy así, no me pude aguantar Su fuego me quemaba y yo no puse atención Pues el morbo en su mirada me nublaba la razón Y subido en esa noria, a puntito de caer Embriagado de un deseo que no me dejaba ver Ni dudaba ni dudé, y que era experto en cagarla Sólo pensaba en besarla y no vi venir el tren Cómo iba yo a saber el pastel que me esperaba Cuando tras esa ventana le vimos aparecer