Desde lo más pequeño del universo Hasta lo más inmenso de este mundo Desde lo que un día se vuelve eterno Hasta lo que vive solo por un segundo De la migaja que alimenta Al ser más pequeño de este planeta Desde las cosas pueriles que existen Para ser feliz o para ser triste Ya no desperdicies nada Todo lo mínimo importa, no te conviene olvidarlo De las cosas simples se forma la grandeza de ser humano Desde de la boca que cura tu ser Hasta el recuerdo que eriza en la piel Todo importa, todo es bello si lo sabes ver Desde el canto sagrado del cenzontle Hasta el silencio que guarda la noche Desde los misterios de las galaxias Hasta el simple aroma de la mañana Desde el cariño que no busca nada Hasta el amor que supera los miedos Desde lo bello que nos llena el alma Hasta en la soledad que un día mata Ya no desperdicies nada Todo lo mínimo importa, no te conviene olvidarlo De las cosas simples se forma la grandeza de ser humano Desde el aroma, canela y cafe Hasta el misterio profundo del ser Todo importa, todo es bello si lo sabes ver Desde las tormentas frías del ayer Hasta los secos desiertos de ahora Desde las hojas muertas en la tierra Hasta el hermoso brillo de la aurora Desde el reflejo intenso que reverbera Hasta el rincon más obscuro del planeta Desde la infima semilla de los arboles Hasta los densos bosques de tu pasado Ya no desperdicies nada Todo lo mínimo importa, no te conviene olvidarlo De las cosas simples se forma la grandeza de ser humano Desde las cartas que nunca entregué Hasta los versos de paz O Gardel Todo importa, todo es bello si lo sabes ver Desde los viejos recuerdos que olvidas Hasta los futuros que aún no caminas Desde los fragmentos de tiempo que vuelan Hasta la enorme memoria de la estrella Desde tu infancia que el patio trasero un estadio volvio Hasta la casa del arbol donde tu princesa vivio Todo importa, todo es bello si lo sabes ver Todo importa, todo es bello si lo sabes ver