¿Por qué, innecesariamente Volviste a besar mi boca? Sabes bien lo que provocan Esos besos que no mienten Y me dejan como roca Hundiéndome en tu corriente Palpita este corazón Al reventar los sentidos Provocando un estallido Y la sed de beberte aflora Aunque al final de la hora La mirada de tu sino Y caigo rendido de nuevo Caigo rendido a tu juego Caigo rendido y el pozo del miedo Se quema en la hoguera del cielo De este fuego Y vamos juntando herejías Rompiendo las reglas del día No existe frontera entre tu alma y la mía Y en una burbuja implosiva Muta la vida Quiso ayer la providencia Por orden establecido Entregarte en comunión Al altísimo divino Cuando el azar trajo un río De deseos y suspiros En la cruz de dos caminos En un impasse de agonía Crucificamos la suerte En tu mirada y la mía Cuando nos vimos de frente Y desnudaste tu vida Y caigo rendido de nuevo Caigo rendido a tu juego Caigo rendido y el pozo del miedo Se quema en la hoguera del cielo De este fuego Y vamos juntando herejías Rompiendo las reglas del día No existe frontera entre tu alma y la mía Y en una burbuja implosiva Muta la vida ♪ De inmaculadas orgías Se llenaron los silencios De savia, nuestros cuerpos Y el mundo, de lágrimas Lágrimas de placer, nunca más podré volver De ese instante eterno y leve Donde la inmensidad sucede (Caigo rendido de nuevo) caigo, caigo (Caigo rendido a tu juego) Caigo rendido y el pozo del miedo Se quema en la hoguera del cielo De este fuego (Y vamos juntando herejías) vamos juntando (Rompiendo las reglas del día) No existe frontera entre tu alma y la mía Y en una burbuja implosiva Muta la vida