Si acaso un día yo me perdiera sé que vos me encontrarías Y aunque perdiendo el tiempo, todo intentarías Para tratar de convencerme y nunca entenderías Que todo lo que quiero es volar, imaginar Ya no me conforma tu filosofía exportada de Hong Kong Ni tu autosuficiencia ni la mía Cuando se resquebraje la débil tranquilidad de tu voz La culpa no sería mía, ni de la flor, ni del color Tal vez la vida te enseñe cosas que sin duda medirías Con la regla de la razón, y no verías Ni un poco mas allá de la ilusoria línea Que solo quiere separar el bien y el mal Cuando logres darte cuenta que solo te mueve la mentira Todo cambiaría, resucitarías Y descubrirías la belleza de extraviarte en tu alma Y renacerías, y te ocultarías en el todo