Sacudiendo los cajones del pasado en mi cabeza, Me he encontrado tres canciones y un cuchillo, Un rizo de una muñeca y un wey cura envenenado, Una cruz llena de besos y un martillo, Un cigarro en la azotea y una guitarra extraviada, Una corona de cobre en mi cabeza Unos besos que murieron por exceso de esperanza Unas ganas de decir. ... No quiero. Un apodo un sobre nombre y en la escuela otra pelea, Un aplauso solitario en mi alcancía, Un asoleado sombrero y un trenecito oxidado, Una cicatriz ya vieja en mi garganta, Una fabrica de velas y un asesinato en vano, Un reporte vial que habla mal de mis arterias, Un vals que en la cuerda floja lo voy a bailar de nuevo, Y unas ganas de decir... que espero. Una mandolina rota por un golpe adormilado Y unas ganas de decir... que quiero. Una puta, un charls bukovky una santa un Maquiavelo Y unas ganas de beberme el suelo.