La lluvia cobija un verso en la sonrisa de la cuidad Y el río viene creciendo en mi corazón. Escucho voces de agua que hablan al niño que vive en mi Y cantan una tonada que no aprendí. La lluvia cobija un verso en la sonrisa de la cuidad Y e río viene creciendo en mi corazón. Escucho voces de agua que hablan al niño que vive en mi Y cantan una tonada que no aprendí. Yo no sé por qué eligo para quedarme Un escondrijo de tinta azul Donde inquietos peces vuelven la tinta luz. La lluvia cobija un verso Y se descuelga para buscar Los peces de luz que escapan por la cuidad.