Allá en mi pueblo La tarde es azul, transparente Tiene un silencio largo, extendido y, sin embargo, se escucha todo En detalle A veces pareciera tener Sonoridades como de infinitos cristales cayéndose Rozándose, rompiéndose por todas partes Como una llovizna o como una música Allá a lo lejos se escucha un canto Chamamecero junto al arroyo Un musiquero medio inclinado En el acordeón Se busca el alma en el instrumento Bien estirado contra su pecho Y por el monte silbando un ave Vuela hacia el sol Con su tinaja de barro y luna La noche viene por la espesura Y como un cirio al lucero enciende Su llama antigua en el arrebol Tras la ventana de una casona Hay una anciana rezando a solas Su novenario, mientras los niños Le cantan rondas alrededor ♪ Por las lagunas los teru, teru Y acaso un duende chamamecero Le está encendiendo todos los brillos Al pedregal Una guitarra de pescadores Busca la orilla en los albardones Y un grillo chilla desafinado En el arenal Medio achispado con guaripola Viene un paisano por el sendero Y entreverado con los jilgueros Recién nacidos quiere cantar Se le atraviesa una garza mora Revoloteando por las totoras Entre los últimos benteveos Atardecidos que ya se van Cómo me gusta mirar la tarde Desenredándose en los palmares Con la fragancia inocente y pura Que trae el viento del naranjal Qué lindo suena en el entrevero De las chicharras y los jilgueros El canto manso y chamamecero De los paisanos de mi lugar Qué lindo suena en el entrevero De las chicharras y los jilgueros El canto manso y chamamecero De los paisanos de mi lugar