Dicen que por las noches nomás se le iba en puro llorar Dicen que no dormía nomás se le iba en puro tomar Juran que el mismo cielo se estremecía al oír su llanto Cómo sufría por ella que, hasta en su muerte la fue llamando Cucurrucucú, paloma Cucurrucucú, no llores Las piedras jamás, paloma ¿Qué van a saber de amores? ♪ Ya me canso de llorar y no amanece Ya no sé si maldecirte o por ti rezar Tengo miedo de buscarte y de encontrarte Donde tus amigos me aseguran que te vas Hay momentos en que quisiera mejor rajarme Y arrancarme ya los clavos de mi penar Pero mis ojos se mueren sin mirar tus ojos Y mi cariño, con la aurora, te vuelve a esperar Y agarraste por tu cuenta la parranda Paloma negra, paloma negra, dónde, dónde andarás Ya no juegues con mi honra parrandera Si tus caricias han de ser mías, de nadie más Y aunque te amo con locura, ya no vuelvas Paloma negra, eres la reja de mi penar Quiero ser libre, vivir mi vida con quien yo quiera Dios, dame fuerza que estoy muriendo por irlo a buscar Y agarraste por tu cuenta la parranda ♪ Por el día en que llegaste a mi vida, paloma querida, me puse a brindar Y al sentirme un poquito tomada, pensando en tus labios, me dio por cantar Me sentí superior a cualquiera y un puño de estrellas te quise bajar Pero al ver que ninguna alcanzaba, me dio tanta rabia que quise llorar Yo no sé lo que valga mi vida, pero yo te la quiero entregar Yo no sé si tu amor la reciba, pero yo te la vengo a dejar ♪ Me encontraste en un negro camino, como un peregrino sin rumbo y sin fe Y la luz de tus ojos divinos cambiaron mis penas por dicha y placer Desde entonces, yo siento quererte con todas las fuerzas que el alma me da Desde entonces, paloma querida, mi pecho ha cambiado por un palomar Yo no sé lo que valga mi vida, pero yo te la quiero entregar Yo no sé si tu amor la reciba, pero yo te la vengo a dejar