Leyendo mentiras en los titulares Mirando las piernas de alguna mujer Ansioso por la conclusión El hombre se larga a pensar Que es así, que el milongón nació en su corazón Y es así, que el milongón creció en su corazón Y es así, que el milongón vive en su corazón Queriendo encontrar el insulto preciso Angustiado porque lo crean un gil Se acuerda de un baile liceal Y a veces le da por pensar Que es así, que el milongón nació en su corazón Y es así, que el milongón creció en su corazón Haciendo un balance de su matrimonio El rostro de piedra en la rueda del bar Inventa un probable final Y en eso le da por pensar Que es así, que el milongón nació en su corazón Y es así, que el milongón nació en su corazón Y es así, que el milongón creció en su corazón Y es así, que el milongón vive en su corazón