La balada del Corto Maltes Corto Maltese es un marinero Con larga fama de aventurero. Muchas mujeres, muchos tatuajes, Toda una vida de viaje en viaje. Cruzó a caballo el Mar Salado Por la causa de los desesperados. Vivió en la China Nacionalista Peleando a muerte con los fascistas. No digo nada que no se sepa, Todo está escrito en la biblioteca, Su poderosa melancolía, Sus cicatrices, su puntería. Son conocidas sus correrías Con los gitanos de Andalucía. Sus performances entre las minas Cuando hizo escala en la Argentina. La propia Reina del Malevaje Besó los labios de sus tatuajes. Los dos bailaron como embrujados Tangos terribles, bien amurados. No digo nada que no se sepa, Todo está escrito en la biblioteca. Las dos almohadas donde durmieron Como barquitos en el Riachuelo. Lo que no dice la biblioteca Es que el romance duró muy poco. Corto Maltese tenía cita Con la aventura en el Orinoco. Ella eligió quedarse callada, Haciendo ver que se la aguantaba. Hubiera podido pero no quiso Decir que estaba esperando un hijo. Día tras día en la Costanera Un niño triste mira y espera. Espera cosas que no aparecen, Papá y el barco, Corto Maltese.